Son muy cómodas. Debido a su diseño ergonómico, no provocan ninguna de las molestias y dolores asociados con el ciclismo convencional, tales como: dolores en las muñecas, mala circulación en la entrepierna, molestias lumbares y cervicales, etc.
Los asientos ergonómicos permiten que el ciclista viaje realmente recostado. Los manillares están sobre el asiento, a nivel del hombro, o debajo del asiento en una posición donde sus brazos cuelgan hacia abajo naturalmente. Esta combinación garantiza su comodidad.

Si, sólo toma poco tiempo adaptarse a la nueva posición de manejo y a la sensación de equilibrio, es realmente fácil.

Puesto que las recumbentes son relativamente infrecuentes, “se notan”, son visibles y no pasan inadvertidas en la calle.
La visibilidad hacia el frente es natural, debido a la postura de manejo. De todos modos, al igual que cualquier tipo de bicicleta, se recomienda el uso de los accesorios de seguridad como espejos retrovisores, refractantes, banderín, casco, etc.
En cuanto al frenado, son más seguras que las bicicletas convencionales, ya que en caso de emergencia, difícilmente salga lanzado sobre el manubrio, esto se debe al bajo centro de gravedad.

Son más rápidas, todos los récords de velocidad en bicicleta se han impuesto por bicicletas recumbentes, pero la pregunta real es: ¿Seré más rápido en una bicicleta recumbente? Aquí hay muchos factores involucrados, como el tiempo que has entrenado en recumbentes, ya que en esta modalidad se utiliza un grupo diferente de músculos, el estilo y peso de la bicicleta, el tipo de terreno, etc.

El factor que más limita la velocidad es la aerodinámica, así que, si quieres ir realmente rápido debes usar un parabrisas bien diseñado o un carenado completo, en este caso la respuesta es: ¡Sí, serás mucho más rápido!. Son entre 15 y 20 % más rápidas. Con parabrisas, son entre 25 y 30% más rápidas y con un carenado completo pueden llegar a ser hasta un 45% más rápidas.

Sí, se requiere una técnica diferente, manteniendo la eficiencia de giro en los pedales, para lo cual se requiere un poco de práctica y acondicionamiento. Ya que en esta posición se utiliza un grupo diferente de músculos, así, ya entrenado, podrás subir más rápido, con un menor esfuerzo físico.

La respuesta es el mejor rendimiento general. A 28.8 Km/h para vencer la resistencia al aire, el ciclista gasta un 80% de su fuerza. A mayor velocidad, mayor  resistencia. Para reducir dicha resistencia al aire, existen dos opciones: reducir el área frontal expuesta al viento o incorporar a la bicicleta un carenado aerodinámico. Ambas soluciones se logran con recumbentes.
La mejora es significativa en la aerodinámica de las recumbentes, la sección expuesta al viento frontal es 35% menor, que en una bicicleta convencional; por consiguiente, el rendimiento en recorridos rápidos mejora considerablemente.

Un ciclista tipo que aplicara una fuerza de 250W en una bicicleta de paseo, llegaría a una velocidad de 29,5 km/h.
Ese mismo ciclista en una bicicleta de carrera, mejoraría hasta una velocidad de 35 km/h.
En una bicicleta recumbente “sin carenados”, esa misma fuerza lo propulsaría a 39 km/h. mientras que la ganancia en una «Low Racer», (diseños específicos para correr con el ciclista muy recostado y con su centro de gravedad muy bajo), sería de 42,5 km/h.